Hay varios factores a valorar que el cliente debería conocer a la hora de llevar el perro a la peluquería. Debería preguntarse, por ejemplo, qué cosmética se utiliza (con un coste directamente relacionado con su calidad y propiedades), qué tratamientos se ofrecen durante la sesión y qué técnicas son más adecuadas para su perro, dependiendo de la raza, tipo de pelo, etc.
También hay que tener muy en cuenta el tiempo empleado en la sesión. No es lo mismo trabajar un perro que está bien cuidado, que aquel que viene esporádicamente a la peluquería... estos perros requieren una mayor dedicación en tiempo y energías.
También es muy importante el estado de las instalaciones y del utillaje utilizado, todo debe estar limpio, desinfectado y esterilizado con la finalidad que el perro no pueda estar expuesto aninguna infección o pulgas de otro perro que haya venido anteriormente.
La formación del estilista también es un hecho a valorar. Un peluquero con buenos conocimientos sabrá en todo momento cuál es el proceso del trabajo a seguir, cuál es la técnica de trabajo más adecuada para que el perro tenga una piel sana, un cabello cuidado y que además luzca en todo su esplendor, destacando las cualidades de su morfología.
Horario
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